domingo, 7 de mayo de 2017

Autoevaluación Parte 3

En esta ocasión se tocaron temas que, aunque se alejan de cierta forma de los temas de política del corte pasado, son de igual importancia con respecto a la población humana, sus derechos patrimoniales y el crecimiento de la especie, aceptándose como son, los limites que se pueden alcanzar y los que se pueden sobrepasar. La humanidad ha estado afrontando problemas desde sus inicios, y el plagio para el beneficio propio, el robo de trabajos y la presión de los monopolios gigantes son solo unas cuantas de las quejas que se pudieron tocar en estas semanas, y, al igual que una enfermedad fatal, es algo que se debe tratar con cuidado y con paciencia si se quiere erradicar el problema de raíz y llegar a un verdadero futuro para toda la tierra.
El valor de la nota para este corte nuevamente lo dejo en manos de la profesora Cristina, pues su imparcialidad es la que guiará a resultados más honestos.

Muchas gracias por todo, profe Cristina.

Tesla vs El Mundo


La ingeniería es una de las bases del crecimiento humano, tanto social como estructural, pues varias de las maravillas que se pueden observar en todo el mundo, desde las pirámides de Giza hasta la Torre Eiffel, todas fueron creadas, de una forma u otra, basándose en la ingeniería, aunque claramente sin obviar las demás ramas de la ciencia. Hasta hace unos siglos se veía el uso de combustibles fósiles como el futuro para el hombre, y lo era, pero recientemente se entendió que cada acción tiene su reacción, y el uso indiscriminado de combustibles fósiles no ha hecho más que denigrar el ambiente en el que vivimos y del cual dependemos, y aún se está luchando por disminuir en gran medida la explotación de dichos combustibles y encontrar un reemplazo efectivo del mismo y que pueda aplicarse a cualquier empresa e institución del mundo, sin que las necesidades monetarias individuales se interpongan en el camino.

El reto principal de la ingeniería no se encuentra solo en crear y mejorar estas tecnologías en pos de la sociedad y el mundo, sino también en la lucha contra las empresas gigantes que buscan denigrar estas tecnologías, puesto que si estos “aparatos” llegan a popularizarse y la gente deja de comprarnos gasolina, entonces nos vamos a bancarrota, y ese negocio de combustibles fósiles tiene unas bases solidificadas que tomaron raíz hace varios siglos, y la sola idea de sobrepasar un negocio así en unos cuantos años es considerado un sueño infantil. Pero si hay algo que se ha podido aprender de todo el transcurso de la humanidad, es que si el sueño del hombre de volar se consiguió hace poco más de un siglo, y el sueño aún más loco de llegar a la luna se consiguió poco más de medio siglo después, entonces no hay nadie que nos niegue la posibilidad de conseguirlo. Después de todo, Chile ya proporciona energía gratis a todo su país gracias a los paneles solares, solo es un paso extra para el reemplazo de la gasolina por este mismo tipo de energía y la humanidad le habrá quitado un gran peso de encima al mundo y a las criaturas inocentes que allí habitan.

El construir y mejorar los instrumentos e inventos es, prácticamente, la parte fácil de todo el asunto, pues, por ejemplo, en menos de una década, la tarea de descifrar el código genético humano paso de necesitar miles de millones de dólares y meses de trabajo a solo 100 dólares y 8 minutos máximo. La ciencia y la ingeniería siempre buscan el método más fácil, rápido y efectivo de resolver los problemas de la vida diaria y la extraordinaria, por lo que en menos de una década se habrá creado un panel con suficiente capacidad de alimentar una población entera y autos que siempre se mantendrán con la carga máxima en todo momento, incluso bajo la lluvia, por lo que no es por ello por lo que debemos preocuparnos. Es el “Big Brother” detrás de cada uno de nosotros por quienes debemos estar alerta, pues una gran idea puede morir en menos de un parpadeo bajo la bala que mata a su dueño.

Leonardo David Ospino Reales

Buscar más beneficio en el crecimiento del mundo



Creative Commons es un movimiento creado en Enero de 2001 como sucesor del copyright, de tal forma que los trabajos que tengan una licencia de Creative Commons pueda ser manejada de una forma más flexible y sin tantas restricciones. Durante mucho tiempo, los documentos con copyright no podían ser compartidos, únicamente a través de la compra de los libros físicos o de los textos en .pdf en las tiendas online, lo cual es benéfico para el autor y la distribuidora, pero les dificulta a aquellos con falta de recursos el poder hacerse con dichos documentos. Tal es el caso de los estudiantes de colegio y universidad, que en un solo año están en la obligación de comprar una alta cantidad de libros que solamente serán usados por menos de un año y luego serán olvidados, por lo que efectivamente se considera como una perdida innecesaria de dinero. Creative Commons permite, por el otro lado, que estas obras puedan ser compartidas, con ciertas restricciones, pero les da la capacidad a las personas del común el poder hacerse con dichas obras y aprender del conocimiento adquirido por estos especialistas.

El problema del copyright en todo su efecto es que, como si dice, en ocasiones las personas con el conocimiento necesario para el crecimiento de la sociedad humana están encerradas en una familia de bajos recursos, y estas familias no pueden darse el lujo de comprar libros todo el tiempo pues existen muchas más responsabilidades y necesidades a cumplir, por lo que estas mentes no tienen más opción que resignarse y este potencial nunca llega a explotarse en su total capacidad. Personalmente, es claro que los autores de dichos libros no viven de las gracias de las personas, pues eso no sirve para pagar los recibos y alimentar a la familia, pero si se puede dar el caso de que las personas menos afortunadas puedan tener acceso a los documentos necesarios para su crecimiento, y por ende, el crecimiento del planeta, entonces es una oportunidad que debe aprovecharse, y eso es algo que Creative Commons permite, una expansión razonable y flexible del copyright, sin pasar al otro extremo del copyleft.

Un claro ejemplo de una institución que usa Creative Commons es Wikipedia, sitio web que, a pesar de estar envuelto en ciertas controversias, es mundialmente reconocido como una enciclopedia del conocimiento general y que está abierta al uso de todos en el mundo, independiente de raza, estrato social y país, y eso es algo que Creative Commons busca, la expansión desenfrenada del conocimiento, pues es esta libertad de compartir y estudiar, este mismo crecimiento, eso es lo que buscan, y hasta el año pasado se han publicado más de mil cien millones de trabajos con licencias de Creative Commons, desde documentos hasta fotos y música, todo para que la sociedad pueda trabajar unida, acreditándose unos a los otros por sus trabajos y que eventualmente la necesidad de copyright sea totalmente erradicada, pues el conocimiento y el crecimiento de la humanidad es mucho más relevante que el crecimiento monetario individual.

Leonardo David Ospino Reales

Las necesidades de muchos se anteponen a las de pocos o de uno



A lo largo de la historia se han visto casos de científicos que roban o plagian el trabajo de iguales que se especializan en su mismo campo de acción, y que se llevan la gloria del trabajo hecho por otro, cosa que tomaba mucho tiempo en descubrirse la verdad, es en épocas recientes que se han visto un abundante incremento en la publicación de “estudios” de dudosa naturaleza o que son completamente falsos, y esto se da por muchas razones, la más común es que los científicos que publican dichos trabajos llevan años publicando otros documentos sin éxito alguno, y que esperan que al publicar un trabajo extravagante, con soborno a los superiores incluido, podría ser finalmente reconocido por sus iguales en el campo de estudio, pero generalmente son estos mismos iguales, con mucha más especialización en dicha área, quienes desenmascaran la verdad sobre la falsedad en la publicidad y esos científicos son llevados ante la ley, expulsados de sus oficinas de trabajo por querer aprovecharse, pensando que su escritura será lo suficientemente buena para engañar al mundo entero, pero como se ha dicho antes, en esta época actual, con la facilidad de transporte de información, ya nadie está a salvo de ser encontrado y llevado a la luz.

Todo esto, por muy jocoso que suene que un científico este robando ideas o simplemente publicando falsedades por recibir atención, es un problema serio y que afecta, no solo a la comunidad científica, sino a la humanidad entera, pues la desacreditación de una institución por culpa de un papel falsamente publicado puede traerle un mal renombre a, no solo la institución, sino a todo el área del conocimiento y a la ciencia misma, pues las personas dejaran de confiar en el juicio y trabajo de los científicos honestos que dan su vida por el avance y beneficio de toda la sociedad. Todo esto por conseguir dinero fácil, lo que eventualmente no hará más que entorpecer más a las personas pues estos, por más difícil que sea de creer, empiezan a denigrar los descubrimientos científicos como simples noticias falsas y se guían por gurus en internet que inventan teorías conspirativas y datos nacidos de la fuma de droga, y las personas, en vez de investigar más a fondo y entender la situación en su totalidad, por el contrario, creen en el juicio de estos personajes. Como ejemplo triste está el caso de los padres que no vacunan a sus hijos por miedo de que las vacunas les causen autismo, historia creada por uno de estos gurus sin trabajo y que las personas han apoyado por su desprecio por la ciencia y el conocimiento, causando la muerte de sus hijos prematuramente solo porque los padres no supieron lo que era tomar un libro.

Los plagios en cuanto a los inventos o rutinas de comedias es un tema directo, donde el culpable es ridiculizado pero las personas siguen adelante, pero un plagio en el campo de la ciencia es un acto en contra de la humanidad misma, es un parasito que debe ser erradicado, pues no vale la pena sacrificar el futuro de la especie solamente por unos cuantos rollos de billetes.

Leonardo David Ospino Reales