Chile, una zona azotada por terremotos y llamado como uno de
los países rezagados de América Latina por décadas, ha logrado salir de ese
vacío y conseguir un nombre para sí, pues en épocas recientes se ha visto una
mejoría notable en cuanto a los estudios y avances tecnológicos, lanzándola
como una potencia en Latinoamérica en el ámbito de la educación y los inventos
que allí se desarrollan, tal es el caso de los vehículos auto-conductores, y la
mejoría de la tecnología verde para el beneficio del medio ambiente, incluyendo
una tecnología de punta para las telecomunicaciones nunca antes visto en esta
parte del mundo. Todo esto vino de la decisión de sus gobernantes de llevar a
su nación a un estado muy por encima de lo que el mundo esperaba de esa
“pequeña” nación. Gobernantes honestos que han peleado por años para el
beneficio de su población humilde y que, al igual que sus gobernantes, aman su
tierra y quieren verla florecer y que su nombre se reconozca en todo el
planeta.
Otro elemento que alza a Chile por encima de muchas otras
naciones es su amor por el medio ambiente, pues se logró la instalación de un
conglomerado de paneles solares que alimentan a la nación entera, efectivamente
anulando el cobro por servicio de luz y logrando el alimento gratis de luz que
muchas otras naciones envidiarían. El estado actual de Chile es tal que muchas
otras naciones vecinas, en medio de la crisis, ven ahora a Chile como su
ejemplo a seguir, cosa que hace unas décadas se pensaba como algo más que un
chiste. Muchas personas en nuestra nación colombiana se mudan a Chile con la
esperanza de obtener todo aquello que aquí no se obtiene ni con el esfuerzo que
uno esperaría, por lo que, si en el futuro Colombia llegase al estado en el que
se encuentra Chile actualmente, es posible que Chile en ese momento se
reconozca como una nación del primer mundo rodeada de países tercermundistas.
Leonardo David Ospino Reales
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